Christian Marquina Estratega Mental

Christian Marquina es psicólogo, estratega mental en alto rendimiento y conferencista TEDx.
Parece por todo lo estudiado que es profundamente racional, pero no es así, no olvida que el amor es importante para una verdadera conexión terrenal. La vida lo llevó por el camino del autoconocimiento, y él lo ha desarrollado tan bien que ahora, a través de su filosofía Equilibrain y su metodología CAME, brinda soporte, guía y mentoría a quienes quieren conocerse, reconocerse y crecer en cualquier ámbito. Conoce más de él en una reveladora conversación.
Por su temperamento emocional, Christian está siempre en la búsqueda de convertirse en su mejor versión, para otorgarla a los demás y ayudarles a su vez a ser mejores personas y líderes. Le apasionan los sets de Lego y el Real Madrid.
¿Cuál fue tu proceso para conocerte, reconocerte y crecer?
Fue un camino complejo, con muchos altibajos, con dolor, frustración, mediocridad… con ganas de no existir, con drogas y alcohol, y con despertares, autoconocimiento, desarrollo personal, responsabilidad, entendimiento, apoyo, aprendizaje, certificaciones, entrenamientos, capacitaciones y descubrimientos. Fue un viaje constante hacia el mundo interior de ese Christian Marquina.
¿Quién te impulsó a conocerte?
Lo que hoy soy se debe a la influencia de diferentes mentores, a quienes no quiero olvidar porque siempre hay que ser agradecido. Un personaje particular, a quien no me tocó conocer, llamado George Ivánovich Gurdjieff, es el padre de los temperamentos; puedo mencionar a Jorge Morales Martínez, con quien pude convivir, el creador de los estrategas mentales en alto rendimiento (EMAR), y a Rocío López, quien me abrió los ojos al mundo de la raíz del autoconocimiento.
¿Qué te llevó a querer compartir ese autoconocimiento?
Cuando creé mi propia metodología en autoconocimiento y viví la experiencia como usuario, y vi tantos cambios en mi vida personal, profesional, social, familiar y de pareja, quise compartir esto con la humanidad. Pude cambiar tanto, alejarme de gente que no me servía —y no tomemos mal el no-servir, sino gente tóxica, envidiosa—, y sin esta metodología no lo habría logrado. Me di cuenta de que es posible vivir tranquilo, vivir muy bien. Cuando me gradué del propio proceso, me percaté de que podía enseñársele a cualquier persona a partir de los 16 años, y es un gozo poder conocernos, ser felices y llegar a ser la mejor versión de nosotros a cualquier edad.
¿Qué es el EMAR y por qué es tan importante?
EMAR significa estratega mental en alto rendimiento. Hoy en día se utilizan mal muchísimos términos, como coaching y programación lingüística. En cierta época todo era “neuro”, como el neuromarketing, o veías coaching para poner uñas, coaching de matrimonios igualitarios o coaching empresarial. Desde ahí te das cuenta de que una persona no tiene idea de lo que está vendiendo, entonces te puedes volver un vende humos. Cuando llegué al mundo del coaching ejecutivo, no el directivo, tuve un “cortocircuito ético”, porque que en la raíz del coaching está la noción de que no puedes dirigir a la persona, sino que la cuestionas; en contraste, la programación neurolingüística (PNL) sí dirige, y ambos métodos se contraponen porque la base de esas herramientas lo hacen. Entonces, no puedes dar coaching con PNL, porque es antiético.
EMAR es una certificación internacional premium que obtienes a través de cuatro certificaciones: coaching ejecutivo no-directivo, cambios conversacionales, PNL, outdoor training certification (OTC), aprendizaje experiencial con énfasis en el outdoor training y andragogía (la forma como los seres humanos adultos aprendemos), todo esto focalizado en el desarrollo de competencias conductuales para la mejora constante en la mentalidad de alto rendimiento y la aplicación práctica de las neurociencias adaptada al comportamiento humano. Esto brinda ciertas herramientas para ayudar de forma adecuada a las personas, porque no todas son iguales: debes saber qué usar con cada una.
En la década de 1970, la PNL fue la panacea, pero era muy complicarlo explicarlo.
Lo que sucede es que Richard Bandler y John Grinder —”los locos” que crearon la programación lingüística— empezaron a descubrir muchas cosas como los canales de absorción de información auditiva, visual y kinestésica. Entonces, estudiaron la correlación entre cómo absorbemos la información y cómo la proyectamos. En la programación lingüística te enseñan el set sí, la metodología para hacer hipnosis —aunque por cierto, no andas por la vida hipnotizando a todo mundo—. Se oye muy bonito cómo generas un anclaje y los metamodelos, pero no hay muchas aplicaciones para la vida cotidiana en la consultoría, no es tan fácil explicarlo y requiere mucha práctica. Aunque hay buenos referentes, como Jorge Morales, Gabriel Guerrero y Omar Fuentes Soto —la persona que, después de Martin Luther King, para mí, es la persona que se comunica mejor como hispanohablante—, qué le depare el futuro a la PNL no lo sé.
¿Y el coaching?
La palabra coaching viene del término húngaro Kocsi szekér, o sea el “Carruaje de Kocs” símbolo de la excelencia. De esa forma el termino kocsi pasó al alemán como ktsche, al italiano como cocchio, el soporte de las carretas de los romanos: eso es el coaching. Entonces, muchas personas se colgaron de eso para utilizar el término coach, como para un entrenador. Pero no, eso no es coaching. Pero de ahí se colgaron, y empezaron a confundir las técnicas. Por eso, si hoy llegas y dices que eres coach, salen corriendo. El coaching viene de Sócrates, Platón, Aristóteles, del prurito por filosofar y cuestionar. Ese es el pasado y el presente, y si es bien llevado tendrá mucho futuro.
¿Qué es la andragogía?
La andragogía es la forma como los seres humanos adultos aprenden. Cuando me volví un estratega, me dijo Jorge Morales: “Crea una herramienta que te ayude como capacitador, entrenador, a romper creencias”. Para trabajar con el pasado y entrenar a una persona debes saber cómo aprende.
Cuando un ser humano nace aprende con pedagogía (que se basa en la repetición inconsciente, como las tablas de multiplicar o los diálogos de las películas); solo se repite, sin razonar. Al llegar a la adolescencia se aprende con hebegogía, a través de la repetición consciente; por eso, cuando a los jóvenes le dices cuatro veces “apaga la luz” se enojan. Y al llegar a la adultez aprendemos con andragogía, a través de la experiencia. Por eso, hasta que te duele el diente, no vas con el dentista. Al llegar a la tercera edad se aprende con gerontogogía; ya no nos gusta aprender tanto, nuestro sistema se enlentece.
¿Qué personas pueden tomar los entrenamientos que ofreces?
Toda persona que quiera conocerse para tomar mejores decisiones. No importa a qué te dediques: seas arquitecto, atleta olímpico, ama de casa o lo que sea, nuestro proceso estrella es el CAME (cambio mental estratégico), que lo pueden tomar personas a partir de los 16 años, que es cuando empieza a desarrollarse la personalidad. Está dirigido a cualquier persona que quiera conocerse, reconocerse y crecer.
¿Por qué los llamas “entrenamientos”?
Porque cada persona necesita entrenar lo que aprende. De nada sirve que leas libros, los marques con amarillo y platiques lo que aprendiste de ellos, si no lo pones en práctica. Entonces, si no hay entrenamiento, no hay aprendizaje.
¿Cuál tendríamos que tomar primero?
Como tengo tres hijos en escuela, tómenlos todos, hay que pagar (risas). Tengo diferentes entrenamientos, personales y empresariales, pero el que todos deberían tomar es el CAME.
Para ti ¿qué define el ADN de un líder?
Creo que eso también se ha confundido muchísimo. He entrenado personas que se dedican al liderazgo, y les pregunto: “¿Tienes agenda llena? Si no creaste algo, no eres líder de nada, porque el liderazgo duele. El liderazgo es una responsabilidad muy complicada. El liderazgo más difícil es ser papá o mamá, y si tú llevas a la empresa el liderazgo como lo ejerces en casa, y viceversa, eso sí es ser un buen líder.
La palabra liderazgo viene de raíces indoeuropeas, y aterrizó en el término en inglés leader. Se refiere a dos conceptos separados, que hablan de la ruta y del buscador de la ruta. El líder es el que pasa primero por el camino, el que se rompe el alma primero y te dice cómo hacer las cosas. Pero el liderazgo cuesta mucho trabajo, el liderazgo duele, y mucho. Por desgracia, abunda la gente que quiere ser líder, pero no quiere romperse el alma. Queremos ganar mucho dinero, estar equilibrados, estar bien con la pareja, pero no queremos dar tiempo a la pareja, no queremos capacitarnos, etcétera. Entonces, ¿cómo queremos convertirnos en líderes?
¿Por qué la empatía es tan importante?
La empatía es la interpretación afectiva de una realidad alterna sobre mi realidad. La empatía es linda, pero, si no la manejas bien, se vuelve tóxica.
¿Cuál sería tu lema de vida?
“Conócete.” Si tú te conoces, te reconoces y aceptas, ya no habrá culpas, solo habrá responsabilidades. Cuestiónate, reflexiona para estar reconociéndote, eso te llevará a un mayor crecimiento en cada etapa de tu vida.